El Museo Marítimo del Cantábrico, situado entre el promontorio de San Martín y la playa de los Peligros, forma parte del frente marítimo de la ciudad de Santander, en la misma orilla de la bahía. Constituye una atalaya de este entorno natural y humano, extensión de su concepto y misión museológica: naturaleza, hombre y tecnología.
En el Museo Marítimo del Cantábrico, el visitante tiene la oportunidad de adentrarse en las profundidades de la biología marina, la etnografía pesquera, la historia y la tecnología del cantábrico y su proyección hacia el mundo.
El Museo Marítimo del Cantábrico está dotado de grandes y modernos acuarios con más de 3.000 metros cuadrados de exposición donde queda patente la relación del ser humano con el mar a lo largo del tiempo.
El lugar preferido de los niños es el gran acuario de la planta cero. Allí encontraréis muchas especies diferentes, incluidos tiburones. Lo mejor de todo es que, a las 12:30, un buzo entra al acuario para alimentar a todos los animales.
Si llega la hora de comer, una buena opción es el restaurante que hay en la última planta del museo. Tiene una amplia terraza con vista al mar, buena comida, buenos postres y menú infantil. Además, si habéis visitado el museo, os harán un descuento enseñando la entrada. De todos modos, es recomendable reservar antes para asegurar la mesa.
Es un sitio excelente para visitar con niños, por los animales, la comida y el descanso de los padres viendo el mar desde la terraza. Se suelen organizar distintos tipos de talleres infantiles, por lo que lo mejor es consultar la agenda según la fecha en la que quieras ir.
Entrada gratuita: Domingos a partir de las 14h (imprescindible reserva previa llamando al teléfono de los detalles de esta actividad).