Camino a San Juan de Gaztelugatxe, a unos 14km de Bermeo, hay un lugar que bien merece la pena visitar, el Faro de Matxitxako.
Se encuentra ubicado en un enclave privilegiado del cabo de Matxitxako en la comarca de Busturialdea - Urdaibai (Vizcaya). Nada más y nada menos, que entre la Reserva de la Biosfera de Urdaibai y el Biotopo Protegido de San Juan de Gaztelugatxe.
Si visitáis el faro y el entorno natural que lo rodea, podréis disfrutar de unas increíbles vistas de toda la costa, desde el famoso islote de San Juan de Gaztelugatxe hasta el Cabo de Ogoño. Incluso con suerte, los días claros, se puede llegar a ver la costa francesa y la costa de Cantabria.
Para llegar al faro y cabo de Matxitxako hay disponibles dos recorridos, ambos con el punto de referencia en Bermeo:
Si visitamos el cabo de Matxitxako, encontraremos dos faros: el antiguo, en desuso, y el moderno, actualmente en funcionamiento.
El faro viejo se inauguró en 1852 y estuvo en funcionamiento hasta 1909. A día de hoy solo se conserva la torre. Fue construido con piedra sillar de las canteras de Durangaldea y entre 1854 y 1863 el edificio se usó como escuela de guardafaros.
El faro actual que funciona correctamente, se encuentra a 110 metros de la antigua torre y se construyó en 1909, cuando dejó de usarse el otro faro. El edificio, que conforma uno de los faros más importantes del Golfo de Vizcaya, se compone de la Casa de los Torreones, los almacenes y un depósito. Presenta una planta rectangular, un cuerpo central de dos pisos y la puerta principal es de arco de medio punto. La torre de éste, se sitúa en un extremo y presenta una planta octogonal, cuya construcción es de mampostería con una cúpula de hierro fundido laminado que alberga la luz del faro.
Desde el cabo de Matxitxako ocasionalmente se puede disfrutar del avistamiento de cetáceos y aves marinas. Además se trata de uno de los puntos más interesantes para ver un bonito atardecer en Urdaibai. El momento es mágico y los mejores meses para disfrutar de los atardeceres más extraordinarios son en abril y octubre, justo cuando el sol se esconde entre San Juan y la península.
Fotos por: "Wikiloc".