Euskal Herria está plagado de lugares como la vía verde de Arrazola, en Vizcaya. Son antiguos tramos de vías en desuso que han sido reconvertidos en auténticas zonas de ocio.
La vía verde de Arrazola, se situa en Axpe Atxondo. Este trazado, utilizado antiguamente para la minería, es un recorrido muy sencillo de realizar con los niños, en el que el entorno rural es el gran protagonista.
En la actualidad, el entorno ha sido reconvertido en zona de ocio, cambiando la vieja vía de ferrocarril por un camino de grava acompañado de espacios verdes con mesas para comer y todo tipo de comodidades.
La vía verde de Arrazola está pensado para aquellas familias que quieren disfrutar de la naturaleza sin realizar largos trayectos, y es que, Axpe Atxondo está ubicado a tan solo 25 minutos del centro de Bilbao.
Hay que saber que en esta vía verde únicamente se permite el paseo a pie, quedando prohibidos cualquier otro tipo de transporte como bicicletas o patines.
La vía verde de Arrazola es uno de los planes familiares más utilizados y un recurso natural muy recurrente, que destaca por sus vistas sobre el macizo de Anboto, en el Parque Natural de Urkiola y el entorno rural que le rodea.
Esta zona vasca no está exenta de la magia y la mitología. Y es que, el monte Anboto, es la morada de Mari, uno de los seres mitológicos más importantes de nuestra tierra. Anbotoko Mari, diosa de la naturaleza, ser mitológico anterior a la religión cristiana, fue uno de los grandes iconos místicos de los vascos, y lo sigue siendo. Un personaje, que junto a los akelarres y las sorginak (brujas en euskera), hace que sumergirse de lleno en un ambiente mágico. ¡Aupa sorginak!